Llevo varias semanas observando y escuchando a muchas personas, que transmiten una cierta inmortalidad, como que vivirán por los siglos de los siglos, ya que su preocupación pasa por centrarse en las acciones de los demás y no en las propias, porque para cambiar ellos, ya tendrán tiempo.
Como siempre, transmito en todo momento, que tenemos un precioso y fantástico recurso llamado tiempo, pero con la particularidad que es limitado y con el agravante que no sabemos cuando se termina, con lo cual si una persona está mal y deja para más adelante intentar volver a su ESENCIA, corre el riesgo de que nunca haya vivido feliz porque se le acabó su tiempo.
Han existido muchas personas que nunca han vivido su vida desde su ESENCIA, se preocuparon por ver la vida de los demás y centraron su energía por aquellas cosas que no podían controlar. Con lo cual su autoestima se fue con el paso del tiempo, enterrándose hasta los niveles más bajos, para no salir nunca más de allí.
La mayoría de las personas dicen que no les importa “el que dirán”, pero cuando deben tomar decisiones para encaminar sus vidas hacia la felicidad, muchos abandonan la idea porque deben cortar con algunos hábitos y eso puede hacerles quedar mal delante de alguien, con lo cual, si les importa “el que dirán!”. (más…)